domingo, 28 de agosto de 2011

Muchas vírgenes, una sola madre.


La investigación que hemos llevado a cabo nos ha otorgado la posibilidad de entender el porqué y las influencias de estas vírgenes "diferentes"sobre los pueblos de nuestra América, sus similitudes y el mensaje que traen cada una de ellas.

El recorrido que ha hecho la religión católica, cristiana, romana y protestante ha hecho que, en ese recorrido se mezcle y formen una amalgama cultural más allá de religiosa. Culturas como la africana, la indígena y las de medio oriente conforman de una manera si no perfecta armónica, de manera tal que el resultado se puede condensar en una sola imagen, en un solo ser(...) La Virgen.

Sea cual sea la rama religiosa a la que se pertenezca o incluso no, se ha oído de ella e incluso en religiones que no tienen que ver con occidente y que han conservado su religión desde siempre (naciones como India) o incluso civilizaciones ya extintas (egipcia), han tenido a lo femenino como símbolo de madre, de lo femenino y va más allá del concepto que tenemos en occidente de madre de Dios o Jesús, la Madre del Mesías, sino como una extensión propia del Dios que lo creo todo, como una mensajera. Es por esto que la simbología y el tratamiento que tiene como madre tiene un significado mucho más grande y profundo de lo que se tiene pensado en países netamente católicos o cristianos, aún así es bien sabido que estas religiones son algo mezquinas con teorías que no estén de acuerdo con lo que ellos creen es la voluntad de dios o Dios. 



Aquí no fundamentaré una religión o un nuevo concepto que se deba tomar como cierto, pues una analogía que pienso hacer es "la voz de Dios, es la voz del pueblo", y en definitiva, ¿no es elpueblo el que fundamenta con su cultura la religión y sus creencias?, ¿No es la gente quien se encarga de fortalecer a su iglesia y su religión, ¿no son los fieles los que a pesar de la situación que vivan están ahí orando y rezando con todo su devoción y alma para encontrar consuelo?, latinoamerica es el ejemplo a dar en este blogg, aunque las creencias se hayan posicionado por la fuerza cada país lo tomó a su modo, le montó rostros indígenas, figuras hechas en barro, y depositó toda su fe a la religión y en este caso no fue la propia virgen la encargada de decidir el futuro de el pueblo entero. Por eso pienso, hay que tolerar y tener la mente suficientemente abierta tanto a la creencia que se tenga como la cultura de donde nace y el respeto por las dos, quizás sea una utopía personal pero sería una convivencia más sana y valorativa del otro como igual pero diferente.

En síntesis, la mezcla de culturas aborígenes, orientales y occidentales hacen de la América de hoy un continente hecho a base de tejidos humanos, que evoluciona, como todo se transforma solo es dar una vista al pasado para poder valorar lo que tenemos hoy y tendrán nuestros hijos mañana, ver que una sola figura femenina puede albergar todo un continente es ver el sentido de madre de manera más amplia, la virgen también fue madre de los movimientos revolucionarios, fue protectora de ejércitos libertadores y unificadora de creencias, es por esto que a mi pareceres digno que se le trate como madre, no solo por lo que esté escrito en la biblia, sino por el verdadero valor de madre, patrona o protectora que se ha ganado y gestado entre los habitantes de este pueblo latinoamericano, desde sus cimientos indígenas (los verdaderos pobladores y dueños de estas tierras que sufrieron los demonios de la guerra, de ser conquistados pero que aún así encontraron consuelo en la virgen), hasta los europeos pasando claro por los africanos y mestizos surgidos de esta mezcla.

Carlos Andrés González Ávila.
Jesús David Pinzón Aponte

Nuestra Señora de Luján: Patrona de Argentina.






El pueblo de Luján 
El lugar empezó a poblarse con los devotos de la Virgen. De esta forma el paraje se convirtió en una aldea que se llamó Pueblo de Nuestra Sra. de Luján, en 1755 se le otorgó el título de Villa.
La devoción por la Virgen fue creciendo año tras año, así como los milagros que ocurrían y el 23 de octubre de 1730, Luján era instituida Parroquia. El cura párroco don José de Andújar deseaba ampliar el templo y junto al Obispo Fray Juan de Arregui, iniciaron la construcción, pero esta no llegó a buen termino porque después de grandes contratiempos terminó por desplomarse.
El Padre Salvaire
Hacia el año 1872, el Arzobispo de Buenos Aires, Monseñor Federico Aneiros, entregó la custodia del templo a los sacerdotes de la congregación de la Misión, conocidos como Padres Lazaristas. En aquel entonces el teniente Cura Jorge María Salvaire fue herido en un viaje por los indios y estuvo al borde de la muerte, en ese momento realizó una promesa a la Santísima Virgen y milagrosamente fue sanado.La promesa del Padre Salvaire fue, “Publicaré tus milagros…, engrandeceré tu Iglesia” En cumplimiento de este voto, publicó en 1885 la “Historia de Nuestra Sra. de Luján”.En 1889 fue nombrado Cura Párroco de Luján y dedicó su vida y esfuerzos para edificar la gran Basílica, con el apoyo de Monseñor Aneiros y la colaboración de sus compañeros de Congregación, inició la construcción de la actual Basílica Nacional

Cuando falleció en 1899, la obra continuó en las manos del Padre Dávani, quien murió en 1922, para ese entonces el Santuario ya estaba terminado en su estructura fundamental.La Solemne Coronación de la Virgen de Luján
EL Padre Salvaire, en 1886, presentó al Papa León XIII, la petición del Episcopado y de los fieles del Río de la Plata para la coronación de la Virgen, el Pontífice bendijo la corona y le otorgó Oficio y Misa propios para su festividad, que quedó establecida en el sábado anterior al IV domingo después de Pascua. La Coronación se realizó en mayo de 1887.
La Basílica de Luján
El Santuario de Luján es de estilo gótico ojival del siglo XIII. Sus dimensiones son: anchura en el crucero, 68,50 m.; longitud, 104 metros; anchura de frente, 42 m.; altura en las dos torres mayores, 106 m. El 8 de diciembre de 1930, el Papa Pío XII, le otorgó oficialmente el título de Basílica.
La Imagen de la Virgen de Luján
La imagen es pequeña (38 centímetros), está modelada en arcilla cocida (terracota), su rostro es ovalado, de color moreno. Los pies de la Santa Imagen se apoyan sobre nubes, desde las cuales surge una media luna y cuatro cabezas de querubines, con sus pequeñas alas desplegadas.Esta cubierta con vestiduras: túnica blanca y manto azul-celeste. Tiene las manos juntas en el pecho.El Padre Salvaire hizo recubrir la Santa imagen con una coraza de plata para impedir su deterioro. Antes de esta operación se sacaron moldes que permitieron su reproducción auténtica.En 1887, el Padre colocó la Imagen sobre una base de Bronce, le adosó la rayera gótica con la inscripción: “Es la Virgen de Luján la primera Fundadora de esta Villa” y una aureola de doce estrellas. Ornamentada en esta forma, fue coronada con la corona Imperial bendecida por León XIII.
El 3 de diciembre de 1871 se realizó la primera peregrinación general al Santuario de Luján, desde entonces millones de personas concurren cada año. Es uno de los centros de peregrinación más importantes de Latinoamérica. Actualmente, la fiesta principal se celebra el 8 de Mayo.

Esta es la virgen que cierra nuestra investigación, las islas caribes, pero solo tomamos la américa continental,por razones de tiempo además de procesos diferentes, por último presentaremos un ensayo que concluya lo que hemos venido publicando.

La Virgen de los 33: Patrona de Uruguay.


La virgen de los 33, su imagen es caracterizada por la desproporcional corona que lleva sobre la cabeza y sus ropas al viento. Otro claro ejemplo de como la religión influye e interacciona con los procesos políticos, culturales de una nación.


La pequeña imagen de la Virgen de los Treinta y tres es una talla en madera procedente de los talleres dgee las misiones que los Jesuitas tenían en el Paraguay a mediados del siglo XVIII.  La imagen fue confeccionada en alguna de las fábricas guaraníes que florecían en estas famosas misiones.
Hacia nel 1779 la imagen permaneció en la capilla que los padres jesuitas atendían en el pueblo del Pintado y tiempo después, al trasladarse la población entera hacia lo que hoy es la ciudad de Florida, los vecinos llevaron consigo la querida imagen ante la que habían orado sus antepasados.
El 19 de abril de 1825, treinta y tres orientales, patriotas del Uruguay, desembarcaron en las playas de la Agraciada para dar comienzo a las guerras de independencia.  Al llegar a Florida se dirigieron al pequeño templo y a los pies de la Virgen colocaron el futuro de la nueva nación.  El 25 de agosto de ese año se proclamó la Independencia Nacional y los constituyentes, después de firmar el acta de la soberanía, volvieron ante la sagrada imagen para colocar la patria naciente bajo su amparo y protección. Desde entonces el pueblo llamó a esta imagen "La Virgen de los Treinta y Tres".  El 25 de agosto de 1975, al cumplirse los 150 años de su independencia, la nación uruguaya declaró oficialmente "Monumento Histórico" a esta imagen de la Virgen y al templo donde se le venera.
La Virgen de los Treinta y Tres mide 36 cm. de alto. Es una talla barroca de la Asunción de la Virgen, cuyas vestiduras parece que se mueven al viento por la abundancia de sus pliegues.
La "Libertadora del Uruguay" porta desde 1857 una corona de oro y piedras preciosas, regalo del segundo jefe de los Treinta y Tres, que luego fuera presidente de la República. Lo desproporcionado del tamaño de esta corona (una extraordinaria obra de orfebrería) ha venido a ser la nota distintiva de esta advocación mariana.
La imagen fue coronada canónicamente en 1961, por concesión de Su Santidad Juan XXIII; quien al año siguiente la proclamó oficialmente "Patrona del Uruguay". La solemnidad de la Virgen de los Treinta y Tres se celebra el segundo domingo de noviembre con una peregrinación a su santuario desde todos los lugares de la nación.

Nuestra señora del Carmen: Patrona de Chile.




Al hablar sobre la historia de la Patrona de Chile es imposible no aludir el proceso independentista llevado a cabo entre 1810 y 1818 e incluso en pleno período hispánico es posible encontrar rastros de ella.

En 1643 nace en Concepción, actual capital regional del Bio-Bío, la Primera Cofradía de Nuestra Señora del Carmen de Chile;en 1662 se funda en Nuñoa, actual Región Metropolitana, la primera parroquia carmelita;en el año 1690, en las postrimerías del siglo XVII,comienza a crearse el Monasterio del Carmen Alto de Santiago;en 1694, el misionero José González Rivera y Moncada construye en tierra de indios dos capillas carmelitas, en Ropocura y Colhué, orillas del Cautín y Bio-Bío.En 1786 un violento terremoto azota el centro y sur del Perú, destruyendo los campos trigueros, demanda que fue satisfecha por Chile convirtiéndose a la economía de esta colonia del siglo siguiente en triguera.Ese año, el 13 de Octubre, un comerciante de estampas religiosas extiende "su humilde mercadería sobre el suelo de ese erial que era ,entonces, nuestra Plaza de Armas, lugar de tránsito de carruajes y caballerías y de ceremonias en los actos solemnes.Corre un leve viento, como en todas las primaveras santiaguinas.El viento levanta las livianas estampas, las hace revolotear por el aire; el comerciante va de un lado a otro, cogiéndolas en su vuelo y poniéndolas a buen recaudo.Pero una se resiste, se eleva, como volantín de un futuro septiembre y se va, se va, se aleja, se pierde entre las callejuelas y los tejados, sobrepasa los jardines y se detiene, por último, en un punto de la antigua Cañadilla, que hoy llamamos Avenida Independencia", con esas palabras es descrito el acontecimiento que es considerado un verdadero milagro por el pueblo en el libro "Maipú, historia y templo"de Hernán Poblete Varas (Pehuén Editores).En ese punto se inicia la construcción de un templo en 1794, bajo el mandato del obispo Francisco Marán, con el nombre de viceparroquia de Renca.En 1819, el obispo Cienfuegos lo eleva a la categoría de Parroquia, cuyo nombre hace alusión a los acontecimientos que motivaron su edificación :Parroquia de la Estampa.En Europa, en tanto, las aguas no estaban tranquilas.Durante el siglo XVIII surge un movimiento cultural-intelectual denominado Ilustración, el cual critica el absolutismo monárquico imperante, con una clara desigualdad y, de paso, sugiere un sistema demócraticocomo forma de gobierno, en donde la teoría de soberanía popular es el eje, o sea, el pueblo elige a sus representantes.Éste fue el comienzo de un conjunto de hechos , como la Independencia de Estados Unidos o la Revolución Francesa, que darían como resultado la Independencia de gran parte de Latinoamérica.A esto debemos sumar la crisis del Imperio Español en todos los ámbitos, dado a que el oro americano había llegado a su fin, la fuente de riqueza para la península se había agotado.Chile no estuvo ajeno a este proceso.Es a través de la concreción de la Primera Junta Nacional de Gobierno, el 18 de Septiembre de 1810, que los criollos inician la separación paulatina de España.Tradición y reforma son las palabras que grafican, sin duda, el período conocido como Patria Vieja.Deseaban seguir siendo fieles al cautivo monarca español Fernando VII,quien fue apresado por Napoleón cuando invadió su reino;pero, al mismo tiempo, querían llevar a cabo reformas que permitieran mejorar su calidad de vida.Chile poco a poco iba adquiriendo el carácter de una nación independiente, siendo la concreción del Primer Reglamento Constitucional Provisorio, promulgado bajo el mandato de José Miguel Carrera en 1812, un ejemplo de lo anterior.El monarca español recupero su libertad y con ello el trono, iniciando, de paso, una época de restauración del poder monárquico, que, en el caso de Chile, se vivió entre 1814 y 1817.En este lado de la cordillera el poder fue recuperado por los realistas, tras el Desastre de Rancagua acaecido el 1 y 2 de Octubre de 1814;mientras eso acontecía en Chile, en Mendoza los patriotas que lograron escapar se reunen y forman el Ejército Libertador de Los Andes, bajo la dirección de los generales Bernardo Ohiggins y José de San Martín, el cual tiene un sólo objetivo:hacer de Chile una nación libre de dominio extranjero.El 5 de Enero de 1817, luego de una intensa preparación de este grupo de hombres y mujeres que duró 3 años, una imagen de la Virgen del Carmen es colocada frente al Templo de San Francisco, en Mendoza.Miles y miles de argentinos se inclinan ante ella, entre la multitud se encuentra el Ejército, quien pide éxito por la empresa ha iniciary la encomienda.San Martín pone en sus manos el bastón de mando que simboliza su autoridad.En una primera instancia, el proyecto de Ohiggins y San Martín tuvo éxito con el triunfo en la Batalla de Chacabuco, desarrollada el 12 de Febrero de 1812. Sin embargo, errores propios y astucias de los realistas propiciaron el Desastre de Cancha Rayada, lo que puso en riesgo todo lo realizado hsat ese momento.Claramente las condiciones no eran las mejores para enfrentar la Batalla de Maipú. Pero, el triunfo llegó el 5 de Abril de 1818 y con ello la Independencia de Chile se aseguraba y la de América iba ganando espacio con el pasar del tiempo.El 23 de Mayo de 1818, la Gazeta Ministerial de Chile, una suerte de diario oficial de la época, publica el texto del decreto promulgado días antes por el Director Supremo referente a la adopción de la Vírgen del Carmen como patrona.El 15 de Noviembre de 1818, peregrinan a pie desde la capital hasta el lugar de la batalla el naciente gobierno en pleno, encabezado por Ohiggins, para poner la primera piedra del Futuro Templo Votivo de Maipu, centro de las celebraciones marianas cada 16 de Julio.Ésta es la historia de la Patrona de Chile, de la protectora de la nación.Una historia que, sin duda,se mezcla con la Colonia y el proceso de Independencia. Es un símbolo nacional, en definitiva.

Nuestra Señora de los milagros de Caaucupé: Patrona de Paraguay.



Es la patrona de Paraguay y su festividad se celebra cada 8 de diciembre en la ciudad de Caacupé, situada 50 kilómetros al este de Asunción. Poco más de 20.000 paraguayos viven en esta ciudad pero durante la primera semana de diciembre todo el país vuelca su mirada a la adoración a la Virgen y más de 200.000 peregrinos visitan la villa cada año.

De todas partes llegan en busca de calmar los males propios o de familiares cercanos. O simplemente para rezarle a la Virgen. Por esoCaacupé es el centro religioso de Paraguay, un lugar de gran vegetación, cerros y arroyos que colaboró activamente en los inicios de la formación nacional del Paraguay.
 

Caacupé es el centro religioso del Paraguay; lugar de encuentro entre la Patria y la Iglesia, porque esta bendita imagen ha acompañado todo el proceso de formación de la nacionalidad paraguaya y es la causa de la fundación de Caacupé.

Siempre se manifestó como la Madre protectora de los más humildes y recibe nombres tan variados como “Nuestra Señora de los Milagros de Caacupé”, “Virgencita de Caacupé”, “Virgen de los Milagros de Caacupé”, “Inmaculada Virgen Azul”, “Patrona de Paraguay” o, sencillamente, “María de Caacupé”.

Cuenta la historia que la primera población se originó en 1600 cuando un indígena guaraní converso de los franciscanos de Tobatí estaba en las profundidades de la selva del valle Ytú en búsqueda de alimentos y leña. Rodeado por otra tribu, los Mbayaes, que era gran enemiga de los conversos, y viendo cercano su fin, tuvo la aparición de la imagen de la Virgen María, que le dijo: -Caaguy Cupe-pe (detrás de la yerba). Allí giró la cabeza el indio y vio un refugio para esconderse en un gran tronco. Así quedó largo tiempo esperando que sus atacantes siguieran de largo sin verlo, cosa que efectivamente sucedió.

El indio prometió, en su escondite, que si salía ileso de este lugar buscaría un tronco y con su madera tallaría una imagen de la Virgen, en agradecimiento. Lo hizo efectivamente una vez vuelto al convento y no sólo una, sino dos tallas realizó en honor a la Virgen: una que conservó para sí mismo y una mayor que entregó a la Iglesia de Tobatí. Nada se sabe de esta escultura, aunque presumiblemente fue destruida por las tribus enemigas.

Durante una gran inundación, se dice que el Padre Luis de Bolaños bendijo las aguas del lago de Ypacarai y en ese momento las aguas retrocedieron dejando al descubierto un pequeño maletín que contenía la pequeña imagen de la Virgen tallada por el indio. Por eso se la llamó “la Virgen de los Milagros”. El indio, por su parte, se estableció en esos mismos valles donde ocurrió el milagro junto a su familia y construyó un pequeño altarcito para la Virgen. En esos momentos ya de toda la región acudían a brindar oraciones en su honor y para 1770 ya se establece la fundación de Caacupé en ese mismo paraje.

La pequeña imagen mide solamente unos 50 cm., viste una túnica blanca y lleva sobre sus hombros un manto azul celeste, ambos bordados en hilos de oro. La Virgen está de pie sobre una esfera que se apoya en una gran media luna. María parece pisar una serpiente, alusión a los textos del Génesis y el Apocalipsis.

El 8 de diciembre es feriado nacional en Paraguay la misa principal se efectúa en la Basílica de Nuestra Señora de los Milagros, una impresionante estructura con el techo de cobre y una explanada de piedras multicolores, ubicada en el centro de la ciudad. La misa comienza tradicionalmente a las 10 de la mañana, y por amplificadores llega a todo el pueblo, que en ese momento ya está colmado de fieles. El Presidente del Paraguay, junto a varios de sus ministros, asiste por tradición a la ciudad a presenciar sus respetos.

Después de la misa comienza la procesión, de aproximadamente una hora, en la que se reza, entonan cantos e himnos y se pide la bendición a la Virgen. Con esta alegre fiesta puede decirse que comienzan las celebraciones de Navidad.

Virgen de Copacabana: Patrona de Bolivia.




Durante la colonia Copacabana, que era parte del Collao o Provincia de Chucuito, fue evangelizado y catequizado por los padres dominicos desde 1539 hasta 1574. Con este propósito establecieron una doctrina en Copacabana y en los otros pueblos vecinos como Pomata, Chucuito, Acora, Ilavi, Juli, Zepita y Yunguyo. Los dominicos, aparte de propagar la fe cristiana católica, como orden mariana, propagaron también una profunda devoción a la Virgen María en toda esta región. Además de propagar el rezo del Rosario, cabe recordar que los dominicos eran desde 1530 los custodios de uno de los santuarios marianos más importantes de España, el Santuario de Nuestra Señora de la Candelaria de las Islas Canarias.
Un hombre llamado Titu Yupanki, descendiente del inca Wayna Qhapak, no abandonó la idea y concibió el proyecto de labrar una imagen de la Vírgen pensando que una vez hecha y trasladada al pueblo sería más fácil establecer la cofradía propuesta. Este escultor aficionado, ayudado por su hermano Felipe, trabajó la imagen de la Vírgen en arcilla, de una vara de alto, por los resultados, esta imagen debió representar la buena voluntad alejada de las gracias naturales de María. Fue colocada a un lado del altar por el Padre Antonio de Almedia, que hacía de párroco. Al dejar Copacabana don Antonio, se hizo cargo de Copacabana el predicador bachiller donAntonio Montoro, quien al ver esa imagen desgarbada, tosca y sin proporciones, mandó sacarla del altar y llevarla con el desaire a un rincón de la sacristía.
Humillado Francisco Tito por este contratiempo y aconsejado por los suyos, marchó a Potosí, que contaba con destacados maestros en escultura de imágenes sagradas. Llegó a adquirir en el taller del Maestro Diego Ortiz, cierto dominio en la escultura y en el tallado de la madera. Con esos conocimientos se resolvió trabajar la imagen definitiva de la Candelaria. Buscó por todas las iglesias de Potosí una imagen de la Virgen que pudiera servirle de modelo, encontrando en el Convento de Santo Domingo a la Virgen del Rosario. Se fijó en ella con suma atención para grabarla en su mente y antes de comenzar su trabajo, hizo celebrar una misa en honor de laSantísima Trinidad, para obtener sobre su obra la bendición divina.
Los Urinsayas, en principio, admitieron fundar la cofradía, pero no aceptaron la efigie labrada por Yupanqui, por lo que éste empezó a buscar comprador. En La Paz, la imagen llegó a manos del cura de Copacabana quien decidió llevar la imagen al pueblo. El 2 de febrero de 1583, la imagen de María, llegó a la población de Copacabana, lo que hace de este santuario mariano uno de los más antiguos de América, junto al santuario de Guadalupe en México y Cocharcas en Perú. Todo el pueblo salió gozoso a recibirla y con gran alegría la condujeron a la Iglesia donde se celebró una misa en su honor y se entronizó la imagen de la LaVirgen.


La Imagen:

El cuerpo de la imagen está tallado en madera de maguey y esta totalmente laminado en oro fino y en sus ropajes se reproducen los colores y las vestiduras propias de una princesa inca. Su forma original esta permanentemente cubierta por lujosos mantos y trajes superpuestos a la talla, luciendo además una larga peluca de pelo natural. La imagen, que mide un poco más de cuatro pies, sostiene a un niño de manera muy peculiar, como si estuviera a punto de caerse. En su mano derecha sostiene un canastillo y un bastón de mando, regalo y recuerdo de la visita que en 1669 le hizo el Virrey del Perú.
La imagen original nunca sale de su santuario, para las procesiones se utiliza una réplica de la misma. Es típico del santuario, que los que visitan salgan de él caminando hacia atrás, con la intención de no darle la espalda a su querida Madre cuya fiesta se celebra el 2 de febrero, día de la Purificación de María o fiesta de la Virgen de la Candelaria, pero, también se celebra el 5 de agosto, con liturgia propia y gran celebración popular.

Nuestra señora de Aparecida:Patrona de Brasil.






La ciudad de Aparecida del Norte en Sao Paulo, Brasil, es conocida  como el santuario mariano nacional más importante, al que acuden peregrinos de todos los países. Aquí es donde se encuentra la Basílica de la Inmaculada Concepción, de Nuestra Señora de Aparecida, la santa Patrona de Brasil.
Por qué el nombre de Nuestra Señora de « Aparecida » para la Inmaculada Concepción ?
Todo comienza en el siglo XVIII, cuando algunos pescadores acostumbrados a pescar en el río Paraiba cerca de Sao Paulo, sacan un día del año 1717 una estatua sin cabeza.  Lanzan de nuevo la red y sacan, entonces, la cabeza  y para su sorpresa  ven que es una Virgen Negra. La leyenda dice que una vez que sacaron  el cuerpo y  la cabeza, la silueta endeble de la Virgen aparecida se volvió extremamente pesada y ya no  pudieron llevársela para ningún lado.

Desde entonces, en la tradición religiosa brasileña, la Virgen Aparecida, bajo el título de Inmaculada Concepción, es la Santa Madre, patrona de las mujeres encinta y de los recién nacidos en las riberas de  ríos y mares, del oro, de la miel, de la belleza y de la seducción. A lo largo de los años la devoción a la Virgen Inmaculada « aparecida » crece,  y numerosas gracias  han sido recibidas. En 1737, el Vicario de Guarantingueta hizo construir ahí una capilla para los fieles.
Una Basílica gigantesca para la Santa Patrona de Brasil
En 1834 se da comienzo a la construcción de una iglesia más grande, que  se  convierte luego en la vieja Basílica, cuando en 1955 se inician los trabajos gigantescos de la « nueva Basílica ». Por decreto del Vaticano, en 1884, con motivo del primer centenario de la proclamación del Dogma de la Inmaculada Concepción, Nuestra Señora de Aparecida fue coronada por el Arzobispo de Sao Paulo, en presencia del Nuncio apostólico. En 1930, el 16 de julio, en un  nuevo homenaje  de la nación  a Nuestra Señora de Aparecida es proclamada solemnemente santa patrona de Brasil, en presencia de  las autoridades civiles y religiosas del país. A mediados del siglo XX, en 1955, se construye la  inmensa Basílica actual.
El segundo santuario mariano más frecuentado del mundo
Gigantesca, en efecto, es Nuestra Señora de Aparecida con su torre de 100 metros de altura, su cúpula de 70 metros, su nave en forma de cruz griega de 173 metros de largo y 168 metros de ancho,  con una superficie total de 18.000 metros cuadrados! Su capacidad de acogida es de 45.000 fieles.   Por sus medidas, Nuestra Señora es la segunda Basílica más grande del mundo, después de la  San Pedro de Roma. En 1980, el Papa Juan Pablo II le dio el título de « Basílica menor ». Convertida en la santa Patrona de Brasil, Nuestra Señora de Aparecida es, entre otros, el sitio de peregrinación de los trabajadores que tiene lugar cada año el 7 de septiembre, día de la Fiesta Nacional. 

Santa Rosa de Lima: Patrona del Perú.



El Perú, representa una excepción en nuestra investigación, porque la patrona de la nación no es la virgen, sino la primera santa latina y americana, por esto decidimos presentar la información ya que es de suma importancia para el pueblo Peruano y latino, pues toda latinoamerica celebre fiestas en honor a él.



Biografía:

Nació en Lima (Perú) el año 1586; cuando vivía en su casa, se dedicó ya a una vida de piedad y de virtud, y, cuando vistió el hábito de la tercera Orden de santo Domingo, hizo grandes progresos en el camino de la penitencia y de la contemplación mística. Murió el día 24 de agosto del año 1617.


Rosa de Lima, la primera santa americana canonizada, nació de ascendencia española en la capital del Perú en 1586. Sus humildes padres son Gaspar de Flores y María de Oliva.
Aunque la niña fue bautizada con el nombre de Isabel, se la llamaba comúnmente Rosa y ése fue el único nombre que le impuso en la Confirmación el arzobispo de Lima, Santo Toribio. Rosa tomó a Santa Catalina de Siena por modelo, a pesar de la oposición y las burlas de sus padres y amigos. En cierta ocasión, su madre le coronó con una guirnalda de flores para lucirla ante algunas visitas y Rosa se clavó una de las horquillas de la guirnalda en la cabeza, con la intención de hacer penitencia por aquella vanidad, de suerte que tuvo después bastante dificultad en quitársela. Como las gentes alababan frecuentemente su belleza, Rosa solía restregarse la piel con pimienta para desfigurarse y no ser ocasión de tentaciones para nadie.

El padre de Rosa fracasó en la explotación de una mina, y la familia se vio en circunstancias económicas difíciles. Rosa trabajaba el día entero en el huerto, cosía una parte de la noche y en esa forma ayudaba al sostenimiento de la familia. La santa estaba contenta con su suerte y jamás hubiese intentado cambiarla, si sus padres no hubiesen querido inducirla a casarse. Rosa luchó contra ellos diez años e hizo voto de virginidad para confirmar su resolución de vivir consagrada al Señor.
Al cabo de esos años, ingresó en la tercera orden de Santo Domingo, imitando así a Santa Catalina de Siena. A partir de entonces, se recluyó prácticamente en una cabaña que había construido en el huerto. Llevaba sobre la cabeza una cinta de plata, cuyo interior era lleno de puntas sirviendo así como una corona de espinas. Su amor de Dios era tan ardiente que, cuando hablaba de El, cambiaba el tono de su voz y su rostro se encendía como un reflejo del sentimiento que embargaba su alma. Ese fenómeno se manifestaba, sobre todo, cuando la santa se hallaba en presencia del Santísimo Sacramento o cuando en la comunión unía su corazón a la Fuente del Amor.

Pruebas y gracias.


Dios concedió a su sierva gracias extraordinarias, pero también permitió que sufriese durante quince años la persecución de sus amigos y conocidos, en tanto que su alma se veía sumida en la más profunda desolación espiritual.
El demonio la molestaba con violentas tentaciones. El único consejo que supieron darle aquellos a quienes consultó fue que comiese y durmiese más. Más tarde, una comisión de sacerdotes y médicos examinó a la santa y dictaminó que sus experiencias eran realmente sobrenaturales. 
Rosa pasó los tres últimos años de su vida en la casa de Don Gonzalo de Massa, un empleado del gobierno, cuya esposa le tenía particular cariño. Durante la penosa y larga enfermedad que precedió a su muerte, la oración de la joven era: "Señor, auméntame los sufrimientos, pero auméntame en la misma medida tu amor".
Dios la llamó a Sí el 24 de agosto de 1617, a los treinta y un años de edad. El capítulo, el senado y otros dignatarios de la ciudad se turnaron para transportar su cuerpo al sepulcro.
El Papa Clemente X la canonizó en 1671.
Aunque no todos pueden imitar algunas de sus prácticas ascéticas, ciertamente nos reta a todos a entregarnos con mas pasión al amado, Jesucristo.  Es esa pasión de amor la que nos debe mover a vivir nuestra santidad abrazando nuestra vocación con todo el corazón, ya sea en el mundo, en el desierto o en el claustro.

Nuestra Señora del Quinche: Patrona de Ecuador.

Nuestra Señora de la Presentación del Quinche


Nuestra señora del Quinche, también se le conoce como Nuestra Señora del Cisne, tienen la misma historia en lo que respecta a la imagen y por lo tanto su historia, solo que, si buscamos por Nuestra Señora del Cisne, nos vamos a topar que so origen se remonta a Europa, especialmente en Francia, pues allí existía una orden de caballero del Cisne, los cuales erigían templos en honor a la Virgen María, esta orden era apoyada por los franciscanos y estos traerían y crearían el culto a Ecuador. Aunque también la Virgen toma su advocación del lugar donde se encuentra que se llama "El Cisne", lo curioso es que el culto ha llegado a todo Ecuador. La palabra Quinche, viene de los nativos y significa lugar. 

LA IMAGEN:

Los caciques quedaron admirados cuando vieron llegar a Diego Robles con la imagen de la Virgen a cuestas y reconocieron en ella los mismos rasgos de la Señora que se les había aparecido y les había hablado en la cueva. Quince años permaneció la imagen al cuidado de los indios hasta que en 1604, el obispo del lugar ordenó su traslado al poblado del Quinche, de donde finalmente tomó su nombre. La imagen, que es una fina talla en madera de cedro de unos 62 cm. de alto, está revestida por un amplio y lujoso ropaje de brocado cubierto de gemas, y bordado con hilos de oro y plata que sólo dejan ver su rostro moreno y apacible. La Virgen lleva un cetro en la mano derecha y con la izquierda sostiene el Niño en actitud de bendecir, mientras sostiene una esfera de oro coronada por una cruz. A los pies de la imagen, la peana y la gran media luna, ambas de plata pura, y las pesadas coronas imperiales de oro y piedras preciosas, manifiestan la generosidad del pueblo ecuatoriano que gusta ver a su patrona resplandeciente, vestida siempre con las mejores galas.El rostro de Jesús evoca las facciones de los niños mestizos de aquellas sierras.

Mestizo es el color de la Madre, síntesis del alma del inca y del español. Su fina nariz está enmarcada por un delicado rostro ovalado de labios delgados y boca pequeña; sus ojos achinados y su mirada triste con los párpados entrecerrados o caídos le confieren una dulzura única.

Por eso esta advocación es tan popular en Ecuador, especialmente entre los indios que llaman con afecto "La Pequerlita" a su protectora del cielo.Es de admirar la variedad de cantos que se entonan en honor de la Virgen del Quinche, con textos en quechua, en jíbaro y en otros diversos dialectos de la región y también en castellano; muchos de ellos se cantan desde hace cuatro siglos. La imagen fue coronada en 1943 y su fiesta se cerebra el 21 de noviembre.

sábado, 27 de agosto de 2011

Nuestra Señora de Coromoto: Patrona de Venezuela.


Patrona de Venezuela, su festividad se celebra el 2 de febrero, el 8 y 11 de setiembre.

Desde mediados del siglo XVII, los religiosos capuchinos empezaron la evangelización de la comarca de Guanare. Entre los indios que habitaban dicha región estaban los Cospes. Se hizo el reparto de tierras e indios en encomiendas, unas cuantas familias de los Cospes se disgregaron de su Tribu y huyeron internándose en las selvas de las dilatadas montañas y valles que se extienden entre Boconó de Trujillo y Guanare, hacia las riberas del río Tucupido. En esos lugares apartados se mantuvieron los Cospes muchos años.

Un español noble y honrado, buen cristiano, llamado Juan Sánchez, había obtenido unos terrenos en la margen derecha del Guanare a unas 5 leguas de la Villa de Espíritu Santo que es la ciudad de Guanare.

Varios años llevaban los Indios Cospes sin que los civilizadores extranjeros hubieran podido conseguir que ellos descendieran a tomar parte en el aprendizaje del cultivo de los campos y de la Doctrina Cristiana. Estaban, según refieren en la historia, en aquellos lugares de la montaña en donde ellos se habían ocultado hacia las fuentes del río Tucupido y su margen derecha.

Estando así las cosas, una mañana del año 1651, el cacique de los Cospes, junto con su esposa y otros indios de la tribu, contemplan asombrados una extraordinaria visión. En la quebrada del río Tucupido, sobre la corriente de las aguas, una hermosa Señora los está mirando con una amable expresión en su rostro; el pequeño niño que lleva en sus brazos también les sonríe plácidamente. La misteriosa Señora llama al cacique, le habla en su lengua y le ordena: «Sal del bosque junto con los tuyos y anda donde los blancos para que reciban el agua sobre la cabeza y puedan entrar en el cielo». El cacique, impresionado por lo que ha visto y oído, decide obedecer a la bella Señora y marcha con su tribu para ser adoctrinado en la religión cristiana.

Comunicada la noticia al español Juan Sánchez, se pusieron de acuerdo y amistosamente se fueron a vivir en un rincón de tierra formado por el ángulo de la confluencia de los ríos Tucupido y Guanare, el nombre de la región es Coromoto.

En esta nueva ranchería vivieron un tiempo preparándose al Bautismo. La familia de Juan Sánchez les dio la catequesis. El Cacique de los Cospes que en un principio asistía gustoso a las instrucciones catequísticas se disgustó luego añorando sin duda la soledad de los bosques y se retiró sin recibir el bautismo. Triste y meditabundo estaba el Indio recostado a su barbacoa días antes de su fuga. Con él se hallaban su esposa, su hermana Isabel y un hijo de éste el cual era llamado Juan.

Todo era silencio en la noche del 8 de setiembre de 1652 pues las indias al ver de tan mal humor al cacique que no se atrevían a decir palabra. Habrían transcurrido algunos instantes desde la llegada del cacique cuando de modo visible y corpóreo se presentó la Virgen Santísima llena en el umbral del bohío, despidiendo rayos abundantes como los rayos del sol a medio día, según palabras de la india Isabel, que iluminaron el recinto con celestial claridad.

Al verla el cacique se enfureció y le dijo: «¿Hasta cuándo me quieres perseguir? Bien te puedes volver, que ya no he de hacer más lo que tú me mandes. Por ti dejé mis conucos y conveniencias y he venido a pasar trabajos». La mujer del cacique le reclamó: «No hables así con la Bella Mujer... No tengas tan mal corazón». Pero él se le abalanzó encima diciendo: «Con matarte me dejarás...». Pero Ella desapareció... y le dejó en la mano un objeto que él creía ser la misma Señora, pues dijo: «Aquí la tengo cogida». Cuando vieron el objeto a la luz de las ascuas que arden en el fogón, se dieron cuenta de que era una imagen de la misma bella Señora con un niño en los brazos. No se calmó con esto la furia del cacique sino que con rabia dijo, poniéndola en el techo de paja: «Ahí te he de quemar para que me dejes».

El rescate de la reliquia fue dramático. El indiecito salió de madrugada a avisar a Juan Sánchez del acontecimiento. Este no creía, como es natural, pero ante la insistencia del niño y viendo la captura rápida de las bestias en la sabana por parte del niño, cosa insólita y rara, el español empezó a creer. Vinieron a la choza del cacique, rescataron la imagen y la llevaron con devoción a la casa.

El cacique huyó con su gente y al verse mortalmente herido por la mordedura de una serpiente en la espesura de la selva, pidió a gritos el Bautismo que le fue suministrado por un buen Cristiano de la Ciudad de Barinas.

El primero de febrero de 1654 fue trasladada la santa imagen con mucha solemnidad al templo de Guanare por orden del vicario Diego de Lozano.

La Virgen de Coromoto es una diminuta reliquia que mide 27 milímetros de alto por 22 milímetros de ancho. El material de la estampa pudiera ser pergamino o "papel de seda"; la Virgen aparece pintada de medio cuerpo, está sentada y sostiene al Niño Jesús en su regazo. Al parecer fue dibujada con una fina pluma, trazada como un retrato en tinta china a base de rayas y puntos. La Virgen y el Niño miran de frente; erguidas sus cabezas coronadas. Dos columnas unidas entre sí por un arco forman el respaldo del trono que los sostiene. La Virgen cubre sus hombros con un manto carmesí con oscuros reflejos morados. Un blanco velo cae simétricamente sobre sus cabellos cubriéndolos devotamente. La túnica de la Virgen es de color pajizo y la del niño es blanca como su velo. La imagen se muestra a la veneración de los fieles protegida dentro en una riquísima custodia.

El 1º de mayo de 1942 fue declarada Patrona de Venezuela por el Episcopado Nacional. El 7 de octubre de 1944, a petición de los obispos de la nación, Pío XII la declaró, "Celeste y Principal Patrona de la República de Venezuela". El Santuario Nacional a la Virgen de Coromoto fue declarado Basílica por S.S. Pío XII el 24 de mayo de 1949 y su coronación canónica se celebró al cumplirse los tres siglos de la aparición, el 11 de septiembre de 1952. El Emmo. Sr. Cardenal Arzobispo de la Habana, Manuel Arteaga y Betancourt, coronó la sagrada imagen de Nuestra Señora de Coromoto en representación del Papa Pío XII. Los venezolanos celebran a su patrona en tres ocasiones cada año, el 2 de febrero y el 8 y 11 de septiembre. 

Nuestra Señora de Chiquinquirá: Patrona de Colombia.

La Virgen de Chuiquinquirá aunque es patrona de Colombia, también a tenido un recorrido e historia en la hermana república de Venezuela, por eso incluiré información de las dos naciones, aunque el título de patrona se lo queda Colombia.





Virgen de Chuiquinquirá en Colombia:
La historia se remonta al siglo XVI cuando Luis Becerra XVI, los frailes y dominicos realizaban expediciones de evangelización en la región del centro del país. Un caballero proveniente de España, Antonio de Santana, en 1560 obtiene la encomienda de la región para levantar una casa dotada con diferentes dependencias, apropiada para la administración de los colonos, los indígenas y esclavos; además debía construir una capilla para oficios religiosos. Posteriormente de España llega un fraile colaborador en las misiones, fray Andres Jadraque que ve la necesidad de dotar la capilla con un lienzo o cuadro de la Virgen del Rosario, advocación promulgada por la Orden Dominicana a la cual pertenecía el religioso. De esa manera acuden a un pintor también español Alonso Narváez que vivía en la ciudad de Tunja, cercana a la región para pedirle que pintara a la Virgen del Rosario. Todos acuerdan poner al lado de la Virgen a sus santos de devoción, San Antonio de Padua y San Andrés.
Para el año de 1563 la pintura hecha de algodón indígena que media 49 pulgadas de ancho por 44 de alto ya estaba ya en la capilla y allí permaneció por más de una década hasta aproximadamente el año 1577. Por entonces, la capilla, que tenía techo de paja se deteriora por consecuencia de la humedad, al punto que la imagen quedó prácticamente borrada. En 1587 aunque algunos difieren y hablan del año 1585, la imagen estaba en tan mal estado que fue llevada dentro de la misma región a la población de Chiquinquirá, allí fue abandonada en una habitación que muy raras veces fue usada como capilla u oratorio. Se dice que incluso el lienzo sirvió para secar granos al sol.
La crónica histórica (elaborada al año siguiente de los acontecimientos) señalan que en el año 1586 María Ramos, una mujer del lugar, sabiendo que el lienzo había guardado la imagen de la Virgen María, decide reparar el viejo oratorio y el lienzo maltratado, otorgándole el mejor lugar de la capilla. Diariamente oraba y pedía a la Virgen del Rosario que se manifestara, hasta que el 26 de diciembre de 1586 cuando María salía del oratorio, una mujer indígena llamada Isabel junto a su pequeño hijo al pasar por el lugar le gritaron a María: "mire, mire Señora...", al dirigir su mirada a la pintura ésta brillaba con resplandores y la imagen, que estaba irreconocible, se había restaurado con sus colores y brillo originales; los agujeros y rasguños de la tela desaparecieron. Desde entonces empezó la devoción a la advocación conocida como "Nuestra Señora de Chiquinquirá".
El santuario fue confiado a la orden de los Dominicos, quienes construyeron un convento a su lado, guardando la imagen hasta tiempos presentes.
Tras un fuerte terremoto, ocurrido en 1785, los frailes deciden construir una nueva basílica en otro lugar de la población y trasladar allí la imagen de la virgen. Esto generó protestas por parte de los vecinos de Chiquinquirá. Pese a todo, la nueva iglesia se edificó y la imagen fue traslada en torno a 1825.
La devoción de la gente por esta imagen se evidencia en múltiples acontecimientos, que van desde las tradicionales "romerías" o grandes peregrinaciones hechas al lugar, pasando por la música popular, hasta hechos históricos protagonizados por personajes como virreyes, obispos y políticos, comenzando con el mismo Simón Bolívar, quien no sólo recibió para su Campaña Libertadora los tesoros y joyas del cuadro, sino que él mismo fue en varias ocasiones a orar por el éxito de su empresa. Finalmente, el gobierno de la República de Colombia decidió en 1916, consagrar la Virgen de Chiquinquirá como patrona del país.
En algunas ocasiones la imagen ha sido trasladada con gran pompa, a la ciudad de Bogotá (unos 100 km al sur) con el fin de pedir a Dios por el fin de guerras, catástrofes o epidemias. El último traslado de este tipo ocurrió en 1999.


Virgen de Chiquinquirá en Venezuela:


Cuenta la historia que una humilde anciana lavandera habitante de un barrio humilde de Nueva Zamora de Maracaibo denominado El Saladillo, en la provincia de Venezuela cumplía su faena en las orillas de la laguna de Coquivacoa cuando una tablita llego a sus manos, sin ninguna particularidad que la hiciere especial, pero al parecer la misma fue recogida por la lavandera dándole la utilidad de tapa para la tinaja de agua. Al tiempo a la anciana le pareció reconocer en la tablita una imagen muy borrosa de carácter religioso y quizá por reverencia la colocó en una de sus paredes. El martes 18 de noviembre de1709 se encontraba absorta en sus que haceres, por lo que no prestó atención a una serie de golpes que se escuchaban en la pared donde colgaba la imagen. Los golpes se escucharon de nuevo, pero ella no se movió. Sin embargo, a la tercera vez, se dirigió extrañada al lugar de donde venían los golpes y sorprendida vio cómo en la tablita se apreciaba claramente la imagen de la Virgen de Chiquinquirá y salia de ella una luz brillante. La sorpresa de tal fenómeno la llevó a la calle donde comenzó a gritar: "Milagro, milagro" y con esto se dio inicio a la gran devoción de los zulianos hacia la Madre de la parte física de Jesús. La imagen se presume fue lanzada como despojo en aguas del mar, de un saqueo de algún pirata en el por aquel entonces Virreinato de la Nueva Granada (hoy Colombia) y se desconoce cuanto tiempo pudo estar flotando en las aguas del mar hasta llegar a la Laguna de Coquivacoa (hoy Lago de Maracaibo). La mirada de la Virgen en la imagen viene dada hacia la izquierda, como dando a presumir que sigue su camino a la entonces Provincia de Venezuela, haciéndose desde entonces la "indocumentada" más querida de este país, presagiando quizá también el gran éxodo de colombianos que han llegado a Venezuela. Luego del portento similar al ocurrido en el vecino Virreinato se quiso trasladar la Imagen a la Catedral de Nueva Zamora de Maracaibo y de hecho se logró hacer hasta cierto tramo de las adyacencias al templo, pero llegada a un lugar determinado la imagen empezó a ponerse pesada en extremo, hasta el punto que hubo que bajarla y dejarla en tierra, sin que luego de esto pudiera ser levantada de nuevo. En vista de las circunstancias a alguno de los pobladores se le ocurrió que quizá la providencia deseaba que la imagen no estuviera en el templo mayor, junto a los mantuanos (los adinerados de la época) sino en la ermita en construcción para ese momento de San Juan de Dios (más acorde con los más desposeídos) hacia el oeste de la ciudad. La sugerencia fue tomada en cuenta y sorprendentemente la imagen recobró su peso original y llegó con honores a la mencionada ermita, hoy convertida en Basilica Menor dedicada a Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá y San Juan de Dios, en la cual se venera desde entonces.
La devoción a la Virgen del Rosario de Chiquinquirá es muy grande en la ciudad de Maracaibo y a la misma se le atribuyen multiplicidad de favores, algunos de los más sorprendentes se han exaltado en hermosos vitrales en la misma Basilica.
La Virgen del Rosario de Chiquinquirá es la formal patrona de la Ciudad de Maracaibo, el estado Zulia y de la Guardia Nacional de la República Bolivariana de Venezuela, fue coronada canónicamente con las ofrendas de oro junto a piedras preciosas y semipreciosas tales como rubíes, zafiros y esmeraldas que su pueblo le ha obsequiado desde la colonia. Dicha corona está sostenida por cuatro ángeles de plata. En la época hispánica la tabla fue cubierta en sus bordes con un repujado de oro, ciertos adornos sobre la imagen como coronas para la Virgen y el niño, la aureola, etc, los cuales han sido retirados en su mayoría a excepción de las corona. Cuenta la imagen con un cetro de oro, zafiros y esmeraldas; la imagen también cuenta con una corona elaborada con piedras denominadas "tumas" obsequio de la etnia guajira.

Historia de la imagen conservada en Colombia:



Cuenta la tradición que entre los primeros conquistadores del Nuevo Reino de Granada, Antonio de Santana, encomendero de los pueblos de Suta y Chiquinquirá, era especialmente devoto de la Virgen del Rosario. Por este motivo fabricó en el pueblo de Suta su dormitorio y pequeña capilla.

Deseando poner en ella una imagen de la Madre de Dios, mandó pintar una imagen de Nuestra Señora del Rosario en una rústica tela de algodón de procedencia indígena. Un pintor español, llamado Alonso de Narváez pintó con bastante arte, una imagen de la Virgen del Rosario. En su paleta usó colores al temple, con pigmentos naturales tomados de la composición mineral de la tierra y del zumo de hierbas y flores de la región. Como el lienzo era casi cuadrado (44 pulgadas de alto por 49 de ancho), el artista balanceó y completó el espacio añadiendo, a los lados de la Virgen del Rosario, las imágenes de San Antonio de Padua y de San Andrés Apóstol por ser el primero patrono del encomendero que solicitaba la imagen y el segundo, del fraile que la había mandado a hacer.

En 1562 el cuadro fue colocado en la capilla techada de paja en la que se filtraba la lluvia y con ella la humedad del ambiente. Esto, unido a la acción del aire y el sol dejaron la pintura en tan mal estado que muy pronto era ya imposible reconocer lo que había sido pintado en ella. A la muerte de Don Antonio, en 1577, su viuda, se trasladó a Chiquinquirá llevándose consigo el cuadro al que colocó en una capilla.

Diez años más tarde vino a aquel lugar María Ramos, una piadosa sevillana cuñada del difunto Santana, quien después de arreglar y limpiar la modesta capilla colocó en ella el borroso lienzo que un día llevara la imagen de la Virgen del Rosario. Cuenta la tradición que el viernes 26 de diciembre de 1586, se disponía a salir de la capilla, cuando una india cristiana le llamó la atención hacia la imagen, que aparecía rodeada de vivos resplandores. Volvió el rostro María Ramos y fue grande su asombro al advertir la transformación que se había obrado en el lienzo, cuyos colores, antes tan borrosos y desteñidos, aparecían ahora vivos y claros.

La Virgen del Rosario que ocupa el centro del cuadro mide aproximadamente un metro de alto; su mirada se vuelve hacia la izquierda, desviando la atención hacia el Niño casi desnudo que lleva en sus brazos. Es una imagen serena cuya delicada sonrisa irradia gran dulzura. El color de su rostro es pálido, lo mismo que el del Niño. Curiosamente, éste lleva en la mano derecha un pajarito de vivo plumaje que un cordel sujeta a su dedo pulgar y de la mano izquierda deja colgar un pequeño rosario. Nuestra Madre apoya su cuerpo sobre una media luna, en una posición que sugiere que va de camino. Cubre su cabeza una toca blanca recogida sobre el pecho, y un manto azul celeste envuelve su vestido de color de rosa. Con el dedo meñique de su mano izquierda sostiene un rosario que le cae en el medio del cuerpo y en la mano derecha porta un cetro de reina.